El Ayuntamiento de Altea albergó esta mañana la tradicional recepción que realiza a los niños y niñas saharauis que participan del proyecto “Vacaciones en Paz”. En total han sido este año cuatro familias alteanas las que han acogido a cuatro niños, de los veinte que están veraneando en la comarca de la Marina Baixa, de las asociaciones Juita y Luali. Los niños y niñas, acompañados de sus familias de acogida, recibieron diversos regalos de la corporación alteana, encabezados por el Alcalde Altea, Miguel Ortiz.

Para Pepe Revert, miembro de la Asociación comarcal Juita, “es de agradecer la solidaridad de toda la comarca, y en espacial del Ayuntamiento de Altea, que financian una parte importante del viaje de estos niños. Durante estas vacaciones realizan una revisión médica , se integran en las familias de acogida, pierdan un poco la desnutrición que en determinados casos traen y dejan la hamada argelina, en la que soportan ahora mismo más de 50 grados de temperatura”. Este año el número de acogimientos se ha reducido respecto a otros años, aunque en nuestra comarca se ha mantenido, “hemos sufrido por la crisis un descenso en toda España, ya que de los 9000 niños que acudían normalmente hemos bajado  este año a 5000 niños. Pero en la Marina Baixa hemos mantenido la misma cifra del año pasado, y en total han sido 22 niños”, destacaba Revert.

Para el Alcalde de Altea, Miguel Ortiz, se trata de una experiencia única, “tanto los niños que nos visitan en los meses de julio y agosto, como para las familias acogedoras. Dentro de nuestras posibilidades ayudamos a que puedan viajar cada año, y disfruten de Altea”. Miguel Ortiz mostraba su agradecimiento a las familias alteanas, que año tras año, acogen a estos niños saharauis, “es de alabar su espíritu altruista en el que se empeñan en compartir parte de los que tienen en este proyecto. Es una experiencia enriquecedora para ambas partes, para los niños que vienen y para las familias que los reciben”, concluyó el Alcalde de Altea.